domingo, 9 de marzo de 2008

Una súper rolísima que ha sido la fuente de varias de mis obsesiones, tanto musicales, como lingüísticas... la versión que canta café tacuba es chida...

Dame la muerte chiquita
dame la muerte pequeña
y así tal vez en tus brazos
alcanzaré gracia plena

Su esencia de alta marea
sus besos de tamarindo
sus pestañas dos palmeras a cuyo vaivén me rindo

Dicen que usted trae las sombras
y por dentro está toda herida

Dame la muerte chiquita
antes del último sueño
una cosa a dios yo pido
un segundo ser su dueño

La venganza es cosa dulce
y este machete que tengo
es por si alguien le hizo daño
que yo por usted me muero
es por si alguien le hizo daño
que yo por usted...

Dicen que usted trae las sombras
y por dentro está toda herida
por una noche en su lecho
soy capaz de dar la vida

3 comentarios:

Raymundo Ibañez dijo...

Esencia, Doña Rosario.

Charito Castillo dijo...

Perdón, copié y pegué...jajaja

Raymundo Ibañez dijo...

Gracias por hacer caso a mis sabias correcciones. Vindicatio delicatus est.